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El fin del mundo y otros horizontes



Revisaba mi álbum de fotos, encontré un horizonte, un momento que me hacía pensar en los sueños venideros de un año nuevo lleno de improbabilidades según los cálculos "Mayas".
Claro todos tenemos sueños y deseos.
Creemos que nos llenarán y traerán satisfacción al instante de alcanzarlos. 
La pura verdad es que sí.
Propóngase alcanzar todos sus sueños; alcáncelos y logrará satisfacción.
Pero sólo por un período de tiempo lastimosamente.

Simple muy simple, el tiempo es infinito ó por lo menos así lo percibimos, por otro lado la satisfacción no cuenta con el mismo destino.
Comprendamos la efímera satisfacción de los sueños.
Aquello emocionante y excitante el día de hoy, es a menudo fácil, aburrido e inclusive infantil en el mañana. 
Hay millones de ejemplos que ilustran este punto de vista: atarse un zapato por primera vez, un primer beso, un primer carro, etc. 
Con el tiempo, la gente crece, y con el crecimiento vienen muchas cosas, lo más importante, la responsabilidad y disciplina de seguir creciendo.

El crecimiento es similar al elusivo horizonte, podemos viajar hacia el horizonte, pero nunca "llegar allí", siempre habrá un nuevo horizonte hacia a donde aventurarse.
Debemos identificar un ideal para todos los ámbitos de nuestra vida, es decir, un cuerpo ideal,una casa ideal, un ambiente de trabajo ideal, etc.
Debemos darnos cuenta que nunca vamos a llegar a nuestro ideal, ó si lo hacemos, no será la situación ideal por mucho tiempo.
Como seres humanos anhelamos crecer, y lo que es ideal hoy probablemente no será lo ideal mañana.
Por lo tanto, podemos alcanzar y lograr lo que deseamos, pero la clave de la felicidad duradera es el crecimiento continuo.
Seguir adelante, seguir con la frente en alto, seguir en dirección al horizonte. 

Sea lo que sea no te preocupes, el fin del mundo no es más que otro horizonte.
Nunca vas a llegar al último horizonte, y eso está bien.
Simplemente sigue creciendo.